Clasificación y Curso de la esquizofrenia
Los manuales actuales diferencian 5 tipos:
- Tipo paranoide: predominan los sentimientos de persecución, delirio de grandiosidad y alucinaciones auditivas.
- Tipo desorganizado o hebefrénica: predomina un discurso y comportamiento desorganizado, absurdo, no apropiado, sin metas ni propósitos en conjunto con estado afectivos neutros, aplanados, que no interactúan con los eventos de la vida que se van sucediendo, y presentan, por otro lado, desinhibición de impulsos. En general muestran falta de interés y de participación.
- Tipo catatónico: con importantes alteraciones psicomotoras, como por ejemplo la flexibilidad cérea, es decir, estar como un muñeco de cera; puede llegar hasta el estupor catatónico (inmovilidad total con descargas motrices, repetición de movimientos), provocando la incapacidad de la persona de cuidar de sí mismo. Sin embargo, en el interior del enfermo puede haber verdaderas tormentas de sentimientos y emociones, que en general solo se manifiestan en una aceleración del pulso.
- Tipo indiferenciado: hay síntomas del tipo que corresponden a una psicosis, pero no cumplen los criterios que los manuales establecen para los tipos paranoide, desorganizado ó catatónico.
- Tipo residual: los síntomas positivos están presentes pero a baja intensidad. (ir a “cuadro clínico”)
La OMS reconoce además los tipos:
Depresión post esquizofrénica: trastorno depresivo, que suele surgir después de un trastorno esquizofrénico.
Esquizofrenia simple: su desarrollo es insidioso, es decir, constante y progresivo. No manifiesta alucinaciones ni delirios (síntomas positivos). Muestra fundamentalmente síntomas negativos.
Algunos síntomas que se pueden presentar en este cuadro son: pensamiento sonoro, oír voces que dialogan, oír voces que comentan los actos que realiza el sujeto, robo e influencia sobre el pensamiento, percepciones delirantes, delirio de influencia, es decir, todo lo experimentado es influido y determinado por otros.
Curso de la enfermedad esquizofrenica:
Cuando los síntomas de una esquizofrenia se hacen presentes una sola vez, desaparecen sin dejar sintomatología negativa. En cambio, se habla de una esquizofrenia cuando en la primera situación que se presentan los síntomas se mantienen durante un tiempo largo, se vuelven a presentar en otro episodio y cuando aparece sintomatología negativa. Se distinguen tres fases:
Fase prodrómica: es la fase en la vida de estas personas que se produce antes del desencadenamiento de la enfermedad, de la crisis. Hay una serie de síntomas que pueden ayudar a detectar el problema con anticipación: nerviosismo, pérdida del apetito, dificultad para concentrarse y dormir, problemas con la memoria, depresión y/o tristeza, piensa que se ríen de él, pérdida de interés en general, etc.
Fase activa: Cuando se desencadena la enfermedad (brotes), en donde se manifiestan los síntomas positivos, alucinaciones, delirios, trastornos del pensamiento… Estas crisis pueden brotar repentinamente, o en otros casos el comienzo puede producirse lentamente y sin poder percibirse. La duración de los brotes varían: desde unas semanas a un año. Lo mismo sucede con los intervalos entre las crisis: según las características del sujeto, puede oscilar entre meses y años (generalmente son de la misma duración en una misma persona).
Fase residual: no todos los enfermos llegan a este punto. En esta etapa los síntomas negativos se agravan y el deterioro general es intenso.
Hipótesis sobre las causas de la esquizofrenia.
Si bien se desconoce las causas de esta enfermedad, algunos estudios dan a entender que la genética, el medio ambiente de la niñez, la neurobiología, y factores psicológicos y sociales son factores importantes que intervienen en la producción de este tipo de cuadros. A veces, ciertos medicamentos y algunas drogas recreativas pueden provocar o empeorar síntomas de este tipo. Sin embargo, el peso relativo de cada uno de estos factores está lejos de ser precisado, y es objeto de acaloradas discusiones.
Por otro lado, es importante resaltar que las investigaciones actuales demuestran que el tipo de intercambio neuronal y la cantidad de sinapsis entre las neuronas, dos variables que afectan la presencia de este tipo de cuadros, se enriquecen y modifican según la estimulación temprana que se haya recibido. Esto hace borroso los límites entre lo genético y lo determinado por los factores ambientales en la niñez.
El psicoanálisis sostiene que se trata de una falencia en la instauración de la Ley que provoca una percepción de la realidad absolutamente modificada en relación a la “realidad cotidiana”. En otros términos, para que una persona pueda decir “yo pienso”, es necesario que haya estado en su primera niñez, bajo la mirada de dos personas (dos cuidadores); si esto no ocurre, las influencias normales de los “cuidadores” se vivirán persecutoriamente o invasivamente. Esto suele ocurrir cuando al momento de nacer, uno o ambos “cuidadores” han vivenciado complicaciones que le impiden vincularse adecuadamente con el niño.
Determinadas cualidades en la interacción padre-madre-hijo producen un modo de vinculación distinto con la realidad y las personas más cercanas. Esta interacción produce que el “yo” de la persona que tiene estos cuadros, asuma características particulares, y se sienta invadido por distinto fenómenos como los delirios y las alucinaciones.
Las correlaciones neurobiológicas entre el consumo de drogas y la esquizofrenia es más clara en los casos de alucinógenos y el uso de anfetaminas; en cambio no con los opiáceos. Esto no significa que hay una relación causal, sino más bien que, aparentemente, para sobrellevar el malestar interior, las personas consumen distintas sustancias. Sin embargo, por otro lado, el consumo crónico de sustancias puede alterar el funcionamiento neuronal, sobre todo las sustancias que se intercambian en la sinapsis; y alterar la respuesta a las necesidades estrictamente humanas de la persona. La falta de respuesta a necesidades humanas como vincularse, ser reconocido, amar y ser amado pueden por si mismo provocar “estados tóxicos” para el psiquismo; por lo tanto, esto puede facilitar la aparición de complicaciones.
Por otro lado, se puede plantear que la cultura tiene una importante influencia sobre las manifestaciones o expresión de un síntoma, dado que la rotulación de una conducta como anormal depende de los principios por los cuales la sociedad se rija. Se le da importancia al papel de la familia, sus interacciones y formas de comunicación. Cabe señalar que suelen poder ubicarse en estas interacciones la falta de reconocimiento humano de uno o varios integrantes del sistema familiar, duelos no realizados por alguno de los integrantes de la familia.
En la terapia familiar hace hincapié en la interdependencia del comportamiento entre los distintos integrantes y se trabaja teniendo por objetivo central el cambio del sistema familiar disfuncional.
Curiosamente, en muchos casos se pudo observar que en la historia familiar de personas con estos cuadros, se registraba el asesinato de alguna persona o la negación de la existencia de algún integrante.
HIPOTESIS BIOLOGICAS
Dado que dentro del concepto de psicosis, se pueden mencionar varios cuadros, para poder brindar algún tipo de explicación en este vasto campo, la atención se centrará en la esquizofrenia, por ser el tipo más común y por ser la más deteriorante y/o permanente.
Se ignoran las causas de la esquizofrenia, pero existen diversas hipótesis. Dentro de las hipótesis etiológicas se encuentran las genéticas, inmunovirales y gestacionales y perinatales y neurobiológicas. Por otro lado puede mencionarse las hipótesis estructurales.
Hipótesis Genéticas:
Existen muchas investigaciones que apoyan que apoyan la hipótesis de que la esquizofrenia tendría una base genética. Los estudios demuestran que la presencia del cuadro en una familia, aumenta la probabilidad de aparición del trastorno. El aumento es más notorio en los gemelos.
Hipótesis Inmunovirales:
Los datos epidemiológicos que avalan una causa infecciosa son poco convincentes. Básicamente la explicación apunta a ubicar como causa, la participación de un virus
Hipótesis de las complicaciones gestacionales y perinatales:
Los niños con antecedentes de complicaciones gestacionales y perinatales tienen mayor probabilidad de contraer este cuadro.
Hipótesis neurobiológicas.
La teoría etiológica más defendida en el pasado sostiene que la esquizofrenia se produce por un defecto estructural o funcional en algún sistema orgánico o en algún mecanismo bioquímico como la transmisión dopaminérgica, de las catecolaminas, de la serotonina, de la MAO entre otras.
Hipótesis estructurales
Se refieren a alteraciones estructurales a nivel macroscópico y microscópico. La base de estas hipótesis es dudosa, ya que se basa en que algunos pacientes esquizofrénicos tienen los ventrículos laterales del cerebro dilatados.